lunes, 1 de noviembre de 2010

CORAZÓN



Amado y cadencioso confidente
que conoce del alfa hasta el omega
de cuanto amor hasta la puerta llega,
de cuanta soledad el alma siente.


Divina luz que llega hasta la mente
en la sangre bermeja y andariega
que el corazón en su latir entrega
con un ritmo incansable y eficiente.


Laborioso artesano en su cantera
que muele sin el pico ni la azada
los rastros del recuerdo en la memoria.


Agita con orgullo tu bandera,
desde el anochecer a la alborada,
para marcar tu roja trayectoria.

ELIZABET ANDREA SANCASSANI
26/10/10

lunes, 25 de octubre de 2010

SOL



Destejería sus rayos en la fuente,
navegaba triunfante por el río,
espléndido iba Febo en su navío
derramando los oros de su frente.


y la tierra callada y obediente,
aún cubierta de gotas de rocío,
engalanó su fértil atavío
con el beso de luz del sol naciente.


Rey brillante, dorado y luminoso,
a quien el mundo entero rinde culto,
mi gratitud hasta tu trono sube.


Siempre serás un mítico coloso
que nadie quiere ver jamás oculto
ni siquiera en el velo de una nube.

ELIZABET ANDREA SANCASSANI

lunes, 9 de agosto de 2010

QUÈ ES EL AMOR



Es el encanto pleno de emoción,
la magia, la dulzura y el apego,
la llama que alimenta el rojo fuego
y el centro de la más loca pasión.


Es un niñito astuto y retozón,
pequeño arquero alado que está ciego
para el que enamorar es sólo un juego
en el que siempre encuentra inspiración.


El amor, todo miel y aroma a rosas,
es capaz de vencer al mismo infierno
y de girar el eje de este mundo.


Es el principio de todas las cosas,
el remo que a la barca da gobierno,
el misterio más alto y más profundo.

ELIZABET ANDREA SANCASSANI

lunes, 26 de julio de 2010

EL MAGO




Es dueño de lo oculto y de su clave,
maestro en dominar el inconsciente;
sus manos se deslizan velozmente
igual que entre las aguas va la nave.


Su rostro imperturbable, quieto y grave
hace durar al público presente
y su galera negra se hace fuerte
de una paloma blanca de ala suave.


Tras un pase genial de su pañuelo,
salen cien flores llenas de fragancia
y una muchacha llena de sonrisas.


El auditorio sigue con desvelo
al mago, que con gracia y elegancia
se despide sin pausas y sin prisas.

ELIZABET ANDREA SANCASSANI

26/10/09